Podríamos decir que ambos países son cuna de grandes talentos que afloran en el mundo del fútbol pero que, como el niño que se convierte en hombre y abandona su hogar, están destinados a marcharse a una liga mayor para seguir progresando. Entre todo ese talento y futuro, dejando de lado la Eredivisie y viajando a Bruselas, un futbolista ha llamado nuestra atención durante los últimos meses. No hablamos de Dennis Praet o Tielemans, quienes llevan tiempo haciendo disfrutar al espectador y cuyos nombres ya empiezan a resonar con fuerza por todo el panorama europeo, sino de Leander Dendoncker.
Nacido en Passendele en 1995, este futbolista es otra de las múltiples joyas que aún con edad juvenil dejó la cantera de un ''grande'' de Bélgica para irse a otro de los equipos históricos del país. Uno de los casos más destacados junto al de su compatriota y compañero Dennis Praet, cuyo caso fue semejante. No obstante a esto, habría que matizar, parecido pero no idéntico. Praet dejó el Genk para recalar en la entidad de Bruselas con 16 años mientras que Leander decidió abandonar la academia del Club Brugge con 15. Y lo cierto es que a pesar de la gran cantidad de talento que habitaba en Neerpede, centro de formación de la cantera del club malva, con Dendonkcer siempre se pensó que en un momento u otro llegaría al primer equipo, como así ha acabado siendo.
El camino recorrido por el joven futbolista no ha sido fácil. Tuvo que presenciar la irrupción de un jovencísimo Tielemans, o como Defour llegaba al club cerrándole así la puerta del primer equipo durante un par de años. No fue hasta inicios del 2015 cuando llegó la oportunidad que acabaría aprovechando. Central de urgencia y sustituto puntual de Tielemans o Defour en el doble pivote los meses anteriores, fue dar la bienvenida el nuevo año y asentarse en el once titular, incluso en ocasiones relegando a la suplencia a los propios centrocampistas ya nombrados.
A pesar de todo, Leander Dendonkcer sigue siendo un desconocido para el gran público europeo, lo que nos puede indicar de qué jugador se trata. El belga es de esos futbolistas que se atisban imprescindibles para un equipo pero que difícilmente se lleven los elogios por parte de la grada. Destacando por su gran lectura del juego, Dendoncker, a pesar de juventud, se muestra seguro y maduro en el juego, ofreciendo siempre ofrece una salida limpia del cuero a pesar de no ser hombre clave en la creación. Sin embargo, ocasionalmente comete errores no forzados debido a su inexperiencia pero que a buen seguro rectificará con el paso del tiempo. Tampoco debemos olvidar el potente disparo con el que cuenta a media distancia. Con todo y con eso, sus mejores virtudes no se encuentran con el balón en los pies sino en las tareas defensivas. Mediocentro de gran posicionamiento e ideal guardaespaldas de sus compañeros que a su vez puede actuar también con nota en la zona central de la zaga, donde ya destacó en su etapa con la cantera del Club Brugge y en sus inicios con Besnik Hasi.
Tras su explosión desde el juvenil al primer equipo y posteriormente a la selección absoluta de Bélgica, Dendoncker, aún con cara de niño, afronta una temporada decisiva para su carrera y progresión. Fijo en el esquema, el mediocentro belga deberá confirmar las grandes sensaciones que nos transmitió a todos durante el final de la última campaña y, además de asentarse en el peldaño más alto del fútbol belga, quien sabe si pronto volar a cielos más altos.
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