El rockero más feo del fútbol

Una vez, alguien con gracia de sobra y un carisma conocido por todos, le describió como “un tío feo de cojones”. Es solo un modo de presentación, no voy a entrar, ni por un segundo, a valorar las características físicas, ni la belleza de este enorme lateral izquierdo. Aquel gracioso carismático no podía ser otro que Pepe Reina, por cierto.

Joan Capdevila, jugador de sobra experimentado y batallador en todo tipo de lides, se ha convertido en uno de esos futbolistas al que todos le tenemos guardado un rinconcito en nuestro corazón balompédico. Un tipo graciosete, por lo que se puede ver en cada entrevista que le realizan, un rockero del balón (es un declarado seguidor de Extremoduro), aunque nada tiene que ver su gusto musical con su forma de comportarse en el terreno de juego, en definitiva y sin lugar a dudas, un tío peculiar. Se trata de un jugador sobrio, bregador y sobretodo cumplidor, es esto lo que le ha llevado a conseguir éxitos para muchos ni siquiera impensables.

El grueso de su carrera deportiva la ha vivido en tres equipos, el RCD Espanyol, donde la empezó y todo hace indicar que la terminará… RC Deportivo de la Coruña y Villarreal. No solo en estos equipos ha militado el internacional español, también Atlético de Madrid y un nefasto paso por Lisboa, en el Benfica, completan su trayectoria. En todos los lugares donde este ilerdense criado en Tárrega ha jugado, ha dejado una huella muy profunda. En Cornellá por su sobriedad, en Riazor por sus cañonazos de falta con la pierna izquierda, en el Madrigal por su oportunismo en la estrategia, en el Calderón aquel difícil año del descenso y en el Estadio de la Luz… bueno, mejor de su paso por el Benfica ni hablamos.

¿Y qué decir de Capdevila en la selección? A mí personalmente, me faltan calificativos aduladores hacia el catalán. Absoluto indiscutible en gran parte de nuestra etapa dorada en el carril izquierdo de nuestra selección, participe activo de aquel ambiente amigable que se respiraba en el vestuario de los nuestros. Su participación con la roja en grandes campeonatos empezó en Portugal 2004, pero visto lo visto el país luso no es lugar fetiche para Capde y nos volvimos en primera fase. Lo bueno de Joan con la selección empieza de la mano de Luis Aragonés, pese a dejarle fuera del Mundial de Alemania fue seleccionado para Austria y Suiza, y como todos sabéis, es allí donde empezó todo. El cielo, como casi todos, lo tocó en Sudáfrica. Maravilloso campeonato el que hizo Capdevila. Inolvidable momento en la celebración con un cubo en la cabeza buscando a Shakira. Aquel día valía absolutamente todo.

Después de Sudáfrica fue cuando Capde optó por fichar por el Benfica, donde a decir verdad llegó fuera de forma y le fue imposible triunfar. Un año prácticamente en blanco y la llegada de un ciclón llamado Jordi Alba, le cerraron las puertas de la selección. Pero para él ha quedado su experiencia, la experiencia de “un jugador normal” como él mismo se define, disputando en Johannesburgo nada más y nada menos que una Copa del Mundo. Ole tú, Joan, que eres grande.